¿Por qué la cadera es tan importante en el movimiento?
La cadera es una articulación central, que conecta el tronco con las piernas y soporta el peso del cuerpo en casi todas las actividades cotidianas. Cuando pierde movilidad —por sedentarismo, rigidez o desuso— el cuerpo empieza a compensar con otras zonas, como la zona lumbar, las rodillas o incluso los tobillos. Esto puede generar molestias, tensiones o sobrecargas funcionales. Por el contrario, una cadera móvil permite desplazarse con fluidez, mejorar la postura y prevenir dolores musculoesqueléticos.
¿Cuál es el rol del kinesiólogo?
El kinesiólogo interviene desde el enfoque funcional del movimiento, sin emitir diagnósticos médicos, pero aportando herramientas clave para la movilidad articular consciente, la coordinación postural y la educación corporal adaptada.
Desde su rol profesional, puede evaluar restricciones en los movimientos de flexión, rotación o extensión de la cadera y enseñar rutinas específicas para restaurar ese rango de movimiento. Estas rutinas se integran en el día a día del paciente o usuario, ayudándolo a moverse con mayor eficiencia, sin recurrir a técnicas invasivas o que impliquen diagnóstico clínico.
En qué contextos puede intervenir
- Personas con sensación de rigidez o falta de soltura al caminar
- Quienes tienen molestias lumbares asociadas a falta de movilidad en caderas
- En programas de estiramientos o movilidad general
- Adultos mayores que desean mantener independencia en sus movimientos
- Como parte de un plan preventivo de salud musculoesquelética
En todos estos casos, el kinesiólogo actúa dentro del marco legal vigente, promoviendo la conciencia corporal y el movimiento funcional como elementos esenciales para una vida más activa, segura y liviana.
¿Necesitás ayuda o una rutina personalizada?
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